Kanevsky visitó ETER y habló con los estudiantes sobre el rol del deseo para ser periodista

Nicolás Abramovich

 

Compartió una charla con los alumnos de tercer año de Periodismo Deportivo, en el marco de la materia Agencia de Contenidos. Para ese curso próximo a recibirse, el periodista llegó al aula y, lo que parecía que iba a ser una simple conferencia de preguntas y respuestas, resultó ser una charla interactiva. En ese ida y vuelta, Kanevsky tomó la palabra y le preguntó a los alumnos algunos tópicos para que ellos desarrollaran. A partir de las respuestas, abrió el juego para que los estudiantes pudieran analizar y hablar desde su punto de vista.

 

El invitado, conocido como “el especialista” por sus grandes conocimientos en tenis y básquetbol, jugó con los alumnos y los llevó a imaginar. Y les preguntó: “¿Qué harían si no existiera el miedo? ¿Cuál sería tu lugar en el mundo eventual? ¿Qué cosas te sacarían de la vocación? A partir de las respuestas que le hizo a gran parte del curso, Kanevsky desarrolló sus hipótesis, sus conclusiones. Esto se pudo dar, en el marco de la gran variedad de respuestas que surgían entre unos y otros. Y además, le sirvió como punto de partida para contar situaciones personales.

 

Kanevsky remarcó -y siempre tiene presente- la importancia que le da a su lugar de origen y comparó su caso con el de otros personajes del deporte. “Yo estoy orgulloso de ser de Bahía Blanca, porque no sería ni el 1% de lo que soy. Mi universo familiar, el universo paralelo. No es casual que Ginobilli haya sido de Bahía Blanca. Que sea de Bahía, tener la familia que tuvo, los entrenadores y el club, a una cuadra, lo forjó. Lo tatuó a hierro. Porque si hubiera sido de otro lugar, no hubiera sido lo mismo”, dijo.

 

Luego, cuando comenzaron las preguntas entre medio de las suyas hacia los estudiantes, el compañero de Victor Hugo Morales, durante 20 años en Radio Continental, contó cómo decidió estudiar periodismo deportivo: “Yo creo que ni siquiera fue una decisión, que fue un imperativo. Cuando era chico aprendí a leer con el gráfico”.

 

Además, agregó la historia en la que él cree que su padre entendió que la profesión que tiene hoy iba a ser lo suyo: “Yo era un adolescente y me había llevado matemática. Tenía que rendir un martes a tarde, pero el problema que había era que a la mañana llegaba el Gráfico a Bahía Blanca. Yo estaba en la cama de la habitación de mis padres con los libros de teoremas a un lado y con la revista en la mano, cuando en teoría debía ser al revés, en el momento en que mi papá abrió la puerta. La cerró sin decirme nada, como diciendo: no puedo. Y eso yo lo tomé como una autorización”.

 

Por último, un estudiante le replanteó una de sus preguntas y le planteó si el Sergio adolescente pudo superar los miedos que tenía. Ante esto, el periodista contestó: “Son batallas cotidianas. Porque en el fondo profundo todos somos todo: somos valientes y seremos temerosos, somos aventureros y a la vez somos de quedarnos en el terruño, pero en el fondo todos sabemos cuál es nuestro deseo y hay que ir hacia ahí. Si no vas hacia ahí, ¿hacia dónde vas?, si no vas por todo, ¿a qué vamos?”.

  • Por Nicolás Abramovich (@abramovich.nico), estudiante de tercer año de Periodismo Deportivo.