Honor, orgullo y amor
Por Antonella Díaz Altamira
Los estudiantes de segundo año de Periodismo Deportivo, tuvieron la visita de Esteban Tries ex combatiente de Malvinas.
Al comenzar a hablar manifestó que durante muchos años la argentina sufrió una “desmalvinacion” y agregó: “El regreso fue mucho peor que estar combatiendo. Al soldado de Malvinas se lo veía como el pobrecito, el derrotado, la víctima. Se decía que Malvinas fue el tanque atmosférico de la dictadura, asique imagínense lo que éramos nosotros. Cuando hablan de la invasión argentina a las Islas me pregunto ¿De qué invasión me están hablando? Es nuestro territorio, nosotros fuimos a recuperar las Malvinas".
Sobre las condiciones de vida en la guerra dijo: “En todas las guerras se pasa frio y hambre. Los únicos días que la pasamos mal fue el 13 de junio que vimos morir a nuestros compañeros y el 14 de julio que vimos como nuestra bandera era bajada y ellos izaban la suya”. Y agrego, “Según Alemania ellos tuvieron 1300 bajas nosotros 649. Pero ellos solo cuentan 255, esos eran los ingleses, para ellos los escoceses, galeses y demás no eran personas parece”.
Esteban Tries no hablo con nadie sobre la guerra durante 20 años por que se sentía encasillado como una víctima y no se sentía cómodo con eso, al hablar con otros combatientes se dio cuenta que no era el único que se sentía así, ahí decidió dejar una empresa que tenía en sociedad y comenzó a hablar: “Para nosotros es una actividad permanente llevar Malvinas a las instituciones, a las escuelas. Y no hablamos solamente de la guerra. La guerra es una excusa para poder hablar de todo el resto, como los valores, de la patria, de los sentimientos, del orgullo y del honor. Por qué nosotros peleamos por la patria gratis".
Cuando se le pregunto cómo le salvo la vida al sargento Manuel Villegas dijo: “No lo pensé, solo dije no puede morir así, merece seguir viviendo. El me gritaba que dispare pero en la mira me aparecía el, asique corrí y les juro que sentí como si una burbuja nos cubriese, pedí ayuda al soldado Ceresuela y lo sacamos del fuego cruzado y esa burbuja desapareció. Volví a ver las balas, escuchar los gritos y seguí”.
Lo más increíble que vió en la guerra fue cuando tuvo que asistir al hospital y veía de un lado a los soldados ingleses y del otro a los argentinos armados “Yo pensaba acá se matan, pero eso no sucedió: ellos fumaban y se reían y los nuestros limpiaban las armas”, ahí comprendió que la guerra era de unos pocos que estaban arriba y tenían intereses cruzados.
Sobre la actualidad de algunos combatientes dijo: “Lamentablemente hay algunos veteranos de guerra que se victimizan para beneficiarse, tanto económicamente o con poder político. Eso duele muchísimo, hay gente que murió al lado de ellos, y ellos no pueden hacer esto con nuestra causa. Pero bueno, el ser humano es así, y es impensado saber lo que puede hacer”.
Para cerrar dijo: “Fuimos, pusieron la música y bailamos. No me arrepiento de haber ido a la guerra. Comprendí lo importante que es la cultura, la educación y eso es lo que trato de sembrar. Confío en ustedes son los frutos del futuro”.
@antonelllaD
Al comenzar a hablar manifestó que durante muchos años la argentina sufrió una “desmalvinacion” y agregó: “El regreso fue mucho peor que estar combatiendo. Al soldado de Malvinas se lo veía como el pobrecito, el derrotado, la víctima. Se decía que Malvinas fue el tanque atmosférico de la dictadura, asique imagínense lo que éramos nosotros. Cuando hablan de la invasión argentina a las Islas me pregunto ¿De qué invasión me están hablando? Es nuestro territorio, nosotros fuimos a recuperar las Malvinas".
Sobre las condiciones de vida en la guerra dijo: “En todas las guerras se pasa frio y hambre. Los únicos días que la pasamos mal fue el 13 de junio que vimos morir a nuestros compañeros y el 14 de julio que vimos como nuestra bandera era bajada y ellos izaban la suya”. Y agrego, “Según Alemania ellos tuvieron 1300 bajas nosotros 649. Pero ellos solo cuentan 255, esos eran los ingleses, para ellos los escoceses, galeses y demás no eran personas parece”.
Esteban Tries no hablo con nadie sobre la guerra durante 20 años por que se sentía encasillado como una víctima y no se sentía cómodo con eso, al hablar con otros combatientes se dio cuenta que no era el único que se sentía así, ahí decidió dejar una empresa que tenía en sociedad y comenzó a hablar: “Para nosotros es una actividad permanente llevar Malvinas a las instituciones, a las escuelas. Y no hablamos solamente de la guerra. La guerra es una excusa para poder hablar de todo el resto, como los valores, de la patria, de los sentimientos, del orgullo y del honor. Por qué nosotros peleamos por la patria gratis".
Cuando se le pregunto cómo le salvo la vida al sargento Manuel Villegas dijo: “No lo pensé, solo dije no puede morir así, merece seguir viviendo. El me gritaba que dispare pero en la mira me aparecía el, asique corrí y les juro que sentí como si una burbuja nos cubriese, pedí ayuda al soldado Ceresuela y lo sacamos del fuego cruzado y esa burbuja desapareció. Volví a ver las balas, escuchar los gritos y seguí”.
Lo más increíble que vió en la guerra fue cuando tuvo que asistir al hospital y veía de un lado a los soldados ingleses y del otro a los argentinos armados “Yo pensaba acá se matan, pero eso no sucedió: ellos fumaban y se reían y los nuestros limpiaban las armas”, ahí comprendió que la guerra era de unos pocos que estaban arriba y tenían intereses cruzados.
Sobre la actualidad de algunos combatientes dijo: “Lamentablemente hay algunos veteranos de guerra que se victimizan para beneficiarse, tanto económicamente o con poder político. Eso duele muchísimo, hay gente que murió al lado de ellos, y ellos no pueden hacer esto con nuestra causa. Pero bueno, el ser humano es así, y es impensado saber lo que puede hacer”.
Para cerrar dijo: “Fuimos, pusieron la música y bailamos. No me arrepiento de haber ido a la guerra. Comprendí lo importante que es la cultura, la educación y eso es lo que trato de sembrar. Confío en ustedes son los frutos del futuro”.
@antonelllaD