Todo un camino cruzado por los sets

Por Micaela Garay

Si bien el tenis es un deporte de tradición en nuestro país que mueve a muchos, es difícil ponerse en la piel de las deportistas que dedican su vida profesional a este deporte. Considerando que Labat fue deportista olímpica en tres oportunidades y compartió su juego con grandes representantes del tenis mundial, que interesante resulta poder conversar con esta protagonista del tenis. En la charla que mantuvo con los estudiantes, se habló sobre los altos niveles de entrenamiento que el deporte demanda a edades tempranas, y la exigencia de aguantar la presión individualmente.

 

Florencia, que fue número uno de la categoría junior a nivel mundial en 1990, en 1994 alcanzó el puesto 26 del ranking de la WTA (Women’s Tennis Federation) y fue campeona panamericana en 1995, dijo que si bien en el Tenis la presión la tiene el deportista en soledad, es algo que le pasa a cualquier competidor y agregó: “En mi caso lo manejaba bastante bien y una vez que entraba a la cancha me olvidaba”. A estas reflexiones que caracterizan al deporte que eligió le sumó el rasgo exitista de los fanáticos del deporte argentino. 

 

Junto a los estudiantes se refirió al tenis de la actualidad con el que ella protagonizó entre 1988 y 2000: “Hoy se juega muchísimo más rápido y creo que había más técnica en la época nuestra. Hoy se prioriza lo físico y la velocidad”, y cuando dice nuestra se refiere a la suya y la de Gabriela Sabatini entre otras. Aunque además argumentó un porqué, teniendo en cuenta que el juego es consecuencia del entrenamiento, cualquier deportista podría adaptarse a otras formas de juego. 

 

El último baile de su carrera fue en Sydney 2000 (ya había participado de Atlanta 1996 y Barcelona 1992) si bien destacó que no le quedó nada pendiente en su carrera: “El tenis me dio mucho más de lo que hubiera imaginado cuando empecé, tuve una hermosa carrera”. Tenía 29 años cuando dejó de competir luego de la cita olímpica. “Era bastante jóven, estaba un poco cansada de viajar. Hay muchas cosas que uno tiene que dejar de lado para jugar todo el año al tenis”.

 

Actualmente se encarga de fomentar estrategias para potenciar a tenistas menores de edad y mujeres dentro de la Asociación Argentina de Tenis. En su rol de gestionar el deporte propuso ampliar la participación de niños y niñas y contribuir con la carrera de las deportistas para que puedan acceder a las competencias ya que para las tenistas implica mucha inversión formar parte en la mayor cantidad de torneos posibles.

 

Hoy disfruta del tenis como espectadora y hasta a veces se sorprende al darse cuenta que formó parte de las grandes canchas de la historia de nuestro tenis. Poder conversar con ella implicó acercarse un poco a lo que vive una deportista de alto rendimiento e intentar conocer, de primera mano, los gestos cotidianos de un espectáculo deportivo que el público tanto disfruta.

 

  • Por Micaela Garay (@micagamuza), estudiante de 3er año de Periodismo Deportivo