El locutor Lucas Grancelli -egresado de la escuela- conoce el otro lado del mostrador. Fue invitado a conversar con estudiantes de Locución sobre su trabajo como dueño de un estudio de grabación: cómo es la tarea de escuchar tantas voces y estar día a día grabando a locutores y artistas.

Los alumnos de tercero de Locución escucharon atentamente cómo es la experiencia de aquel que los puede contratar: a qué cosas prestar atención, de qué manera grabar un demo, cómo presentarse a un estudio de grabación o productora. Esos fueron algunos de los tips que Lucas compartió a la clase, que atentamente escuchaba y tomaba nota de cada una de las recomendaciones.

Muchas dudas comienzan a aparecer sobre todo a esta altura de la cursada. Quienes escuchaban tienen planeado recibirse en tan solo unos meses y la salida al campo laboral suele ser un poco cruel en cualquier disciplina. Es también parte del aprendizaje previo a recibirse saber de qué manera empezar a buscar trabajo. Las oportunidades son muchas, y hay que saber estar bien preparado. Que las oportunidades nos encuentren listos y trabajando, sobre todo, en el perfeccionamiento de la voz y la interpretación. 

Después, llegó el momento de la acción. Uno a uno comenzaron a dar lo mejor de cada uno frente al micrófono. Tomándolo con la seriedad de un casting. De esto se trataba el ejercicio. Fueron atentamente escuchados por el invitado, y por sus profesoras de Locución y Entrenamiento Vocal que los acompañan desde principio de año. 

Las propuestas fueron variadas. Pasaron al estudio y, en primera instancia, cada alumno leía la publicidad indicada con la entonación que quería según su interpretación. Para la segunda toma, recibían instrucciones y correcciones que hacían que la locución se acercara más a la necesidad de la marca. Escuchaban una cortina musical que los ubicaba en tiempo y espacio, y así sabían si necesitaban leer con más calma, o con más ímpetu. Siempre esas segundas pasadas resultaban mucho mejores que las primeras. Ante esto, se notaba la sonrisa de Lucas y también de Violeta y Cecilia, las profesoras que también escuchaban atentas. Algunos con más seguridad, y otros con algunos nervios. Todos dieron su 100% para exprimir al máximo sus facultades vocales, y esto ameritó la felicitación del invitado. 

Finalmente, llegó el momento de las devoluciones. En términos generales, se pudo notar en la escucha buena calidad sonora, y buen ejercicio; todo esto fruto de la intensa práctica que vienen llevando los alumnos durante la cursada. Tanto Lucas (que escucha cientos de voces a causa de su trabajo) y las docentes estuvieron muy conformes con la performance de los estudiantes, quienes, siguiendo por este camino, se convertirán muy pronto en profesionales de la voz.

*Lucas Leonel Di Costa (@lucas_dicosta), estudiante de tercer año de la carrera de Locución.