Dignidad frente al cambio

Por Diana Agustina Fernández
En la materia Historia de los Medios, los estudiantes de Periodismo se estuvieron preguntando sobre el rol del periodista profesional y los cambios de "paradigma" dentro de los medios. Para aclarar sus dudas, se acercaron a ETER Silvia Martínez Cassina, periodista y conductora del noticiero de El Trece, Francisco Rabini, delegado de SiPreBA (Sindicato de Prensa de Buenos Aires) en Clarín y Jonathan Raed, periodista e integrante del Consejo de Administración del diario Tiempo Argentino.

El escenario está cambiando. Como todo. Como todos. Pero cuando ese cambio significa 2500 puestos de trabajo menos, precarización laboral para los que aún lo conservan, un sindicato que no representa y que acuerda un 20% de aumento salarial en tres cuotas -la tercera, en enero-, cuando te piden ser cronista, redactor, fotógrafo y más por el mismo sueldo, según los invitados sólo hay una respuesta posible: “Unidad y lucha”.

Por esta razón, marcharon junto a los trabajadores y trabajadoras de prensa el día posterior al del periodista desde Obelisco hasta el Ministerio de Trabajo bajo el lema: “Sin trabajo no hay libertad de expresión”. Por la noche, en ETER Cassina dijo: “Estamos en un momento de inflexión, un momento de crisis en cuanto a la formación y el ejercicio de la profesión”, y cuestionó: “¿Cómo vamos a tener un periodismo riguroso, crítico, serio y responsable con estas condiciones laborales?”.

El avance de la tecnología, mal utilizado, puede llevar a la precarización laboral y a la desinformación. Y más aún si, por el contrario, lo que genera la noticia no es la información sino el rating del minuto a minuto o la cantidad de clicks en las redes o visualizaciones de un video. “Cuando esto se fue convirtiendo en empresa, en negocio, en monopolio, se empezó a perder de vista lo que es el ejercicio de nuestra profesión”, analizó Cassina.

Las nuevas formas de comunicar a través de medios digitales también afectaron las condiciones laborales. Francisco Rabini lo explica claramente en este audio:



El mercado laboral es chico y ahora más que antes. Frente a este escenario, los alumnos expresaron a los invitados sus dudas: qué tan afines se sienten con el medio en el que trabajan y cómo no poner en riesgo esa fuente de trabajo con las diferencias ideológicas y los reclamos por mejores condiciones. “Tenemos que entender que somos trabajadores. Trabajadores de prensa. Cada uno trabaja donde consigue, donde se puede y ahí se da la batalla interna”, dijo el delegado de SiPreBA y periodista del diario Clarín, Rabini, y agregó: “Los puestos de trabajo los defendemos con unidad y con organización”.

Raed, periodista de Tiempo, no se quedó atrás en el debate: “Uno no es la línea editorial del medio en el que trabaja. La idea es poder ser uno mismo dentro del medio”. A lo que Cassina agregó que no se trata de tener afinidad ideológica con el medio o no, sino de ejercer con dignidad y libertad la profesión. “Y cuando no te dan la libertad, resistir”.

Además, recomendaron que todos quienes ejercen el periodismo deben saber sus derechos, haciendo especial hincapié en la “cláusula de conciencia”: La empresa no puede obligar a sus trabajadores a decir, escribir, firmar algo que vaya en contra de sus principios, sus valores morales y sus ideas.

La conductora de El Trece lo deja aquí en claro:



“Para un periodista, lo peor es dejar de preguntar. La autocensura es la verdadera censura”, concluyó.

Diana Fernández