“La antropología se encarga de deconstruir todo aquello que aparece como dado”
Por Nicolás Lafuente | @nickolafuente
Lía Ferrero, antropóloga y autora de la nota “Al gauchito le dio vergüenza” para Revista Anfibia, visitó este martes a los estudiantes de 1er año de Periodismo en la sede de Villa Crespo en el marco de la materia Historia Argentina llevada a cabo por Silvia Fernández, docente de la carrera. Uno de los temas principales que se trataron en la charla fueron el cómo surgió la idea de producir esa nota que conmemora los 40 años del Mundial de 1978, en el que el seleccionado Nacional logró obtener su primer título mundialista, y todo lo que rodeó aquella época del país.
“Siempre estuve interesada en cuestiones relacionadas a la memoria, como por ejemplo en el proyecto de las Abuelas de Plaza de Mayo en el cual fui parte. Pero cuando pensé en el Mundial de Argentina 1978 me enfoqué más en las problemáticas que se generaban dentro del campo de la memoria”, agrega Lía Ferrero al comienzo de la charla. Por otra parte, como dice en su nota de Revista Anfibia, la antropóloga remarca que aquella Copa del Mundo era un dispositivo de la dictadura en la cual se encontraba sumergido el país. “Con los gritos de los goles tapaban los gritos de los capturados en la ESMA por decirlo de alguna manera. La antropología, como disciplina, se encarga de deconstruir todo aquello que aparece como dado, aquello que aparece como normal, lógico y aceptado por todo el mundo”, señala.
Lía Ferrero actualmente da clases a estudiantes de Periodismo Deportivo en la Universidad de La Plata y en la Universidad Nacional de San Martín, en una diplomatura de Política y Gestión Deportiva para dirigentes deportivos, pero además dice que: “A veces se me suele acusar de estos comentarios que yo hago sobre la relación que hubo entre Mundial y dictadura. Sí, por supuesto que hubo una relación, pero eso no quiere decir que obturen otras lecturas que hayan tenido aquella Copa Mundial. La antropología se basa en los sentidos, y a mí me faltaba entender qué sentidos había tenido aquél evento para el que fue a la cancha. Entrevisté a varios de estas personas, y la gran mayoría era consciente de lo que sucedía en el país; algunos sabían más y otros menos, pero estaban al tanto de todo".
“Siempre estuve interesada en cuestiones relacionadas a la memoria, como por ejemplo en el proyecto de las Abuelas de Plaza de Mayo en el cual fui parte. Pero cuando pensé en el Mundial de Argentina 1978 me enfoqué más en las problemáticas que se generaban dentro del campo de la memoria”, agrega Lía Ferrero al comienzo de la charla. Por otra parte, como dice en su nota de Revista Anfibia, la antropóloga remarca que aquella Copa del Mundo era un dispositivo de la dictadura en la cual se encontraba sumergido el país. “Con los gritos de los goles tapaban los gritos de los capturados en la ESMA por decirlo de alguna manera. La antropología, como disciplina, se encarga de deconstruir todo aquello que aparece como dado, aquello que aparece como normal, lógico y aceptado por todo el mundo”, señala.
Lía Ferrero actualmente da clases a estudiantes de Periodismo Deportivo en la Universidad de La Plata y en la Universidad Nacional de San Martín, en una diplomatura de Política y Gestión Deportiva para dirigentes deportivos, pero además dice que: “A veces se me suele acusar de estos comentarios que yo hago sobre la relación que hubo entre Mundial y dictadura. Sí, por supuesto que hubo una relación, pero eso no quiere decir que obturen otras lecturas que hayan tenido aquella Copa Mundial. La antropología se basa en los sentidos, y a mí me faltaba entender qué sentidos había tenido aquél evento para el que fue a la cancha. Entrevisté a varios de estas personas, y la gran mayoría era consciente de lo que sucedía en el país; algunos sabían más y otros menos, pero estaban al tanto de todo".