Julia Dominzain en ETER: "Mantener la idea de tener algo para decir"

Por Rocío Viñes | @roo.vines

La periodista de revista Anfibia y corresponsal de RT en Español, Julia Dominzain, dio una clase especial para los estudiantes de segundo año de la Carrera de Periodismo del turno noche. La invitada estuvo acompañada del docente Adrián Figueroa Díaz con quien dictó la materia de Técnicas Periodísticas IV.

 

El docente presentó a Julia a través de un breve recorrido sobre su trayectoria como periodista. Ella trabajó un tiempo en Cosecha Roja y como cronista estuvo tres años y medio en Rusia, en el medio Russia Today. Es egresada de ETER y actualmente es cronista en Anfibia. Dominzain conversaró con los estudiantes sobre la metodología de su trabajo, cómo saber buscar información y cómo armar una buena entrevista a través de su propia experiencia.

 

Luego de la introducción que se relató a través del recuerdo y en modo de crónica de cuando la invitada era estudiante de Díaz, ella comentó que le pareció divertido dar una clase sobre técnicas periodísticas pero que no se percibía como una buena entrevistadora. Según ella, el único modo en que podía realizar una buena entrevista era con métodos, planes o con una fórmula. “El método es como un refugio sobre el cual me puedo apoyar para tener seguridad”, confesó Julia Dominzain.

Entre relatos de experiencias, Dominzain citó el texto de Leila Guerreiro: “Tengan algo para decir”. Guerriero escribió una columna donde contaba que todo el tiempo le pedían consejos de cómo ser periodista y que no sabía qué decir. En esa columna,  dijo lo que pensaba y al final repitió tres veces: “Tengan algo para decir”. “Tiene ésta conclusión que está buena, no decir cosas por decir sino preguntarte: ¿qué escribís? y ¿qué comunicas? Hay que encontrar un punto pero no forzosamente sino pensar qué decís, me pareció un buen ejemplo”, resaltó Dominzain. 

 

La periodista compartió su metodología antes de realizar una entrevista y la dividió en cinco puntos. Primero se sumerge, consume el producto de su personaje, por ejemplo, si el entrevistado es músico, escucha sus temas. En segundo lugar, busca información, durante la clase les recomendó a los estudiantes que no se quedaran en las primeras páginas de Google sino que leyeran hasta los últimos links. Este ejercicio consideró que les ayudará a hacer buenas preguntas. En tercer lugar, escribe un punteo donde anota los ejes, temas, fechas, disparadores de lo que leyó o escuchó. En el cuarto lugar, arma el punteo en forma de preguntas concretas. Acá vuelve entonces a la responsabilidad y se pregunta: “¿qué se quiere comunicar? Finalmente, en el quinto punto, vendrán las charlas con el entrevistado y las repreguntas.

 

 

Dominzain les recomendó a los estudiantes que para tener un eje, el punteo y las preguntas tenían que pasar por el filtro de cierta búsqueda y originalidad. De esta manera, el texto según su opinión, se armaría de un modo tal que rinda. “Tiene que haber un principio y un final interesante. Esa búsqueda en donde un párrafo te lleve al siguiente e intentar seducir todo el tiempo al lector para que siga en el texto y mantener la idea de tener algo para decir”, concluyó la periodista.

 

*Rocío Viñes, estudiante de periodismo, 3er año, ETER.