Paro de 48 horas, Festival de Música y solidarización: NO a los Despidos en Clarín

Por Bruno Cativiela | @brunocativiela
El Grupo dueño de Artear, Pol-ka, Cablevisión, entre otros, despidió 65 empleados durante la última semana. Por ello, colegas y compañeros fraternizaron y exigieron la reincorporación con un fuerte grito que acompañado de música proclamó: “NO a los #DespidosEnClarín”.

No. No hay que dejarse engañar.


Las bandas que sonaron en vivo no estaban celebrando. Los puestos de choripán no eran para festejar. Las vallas de seguridad que separaban la calle con la vereda no estaban puestas para ordenar. Las banderas colgadas no eran de fanáticos.

La multitud no era jolgorio.

El Grupo Clarín despidió 65 empleados de su redacción durante la última semana. Periodistas y reporteros gráficos del diario papel, además del deportivo Olé, perdieron sus puestos sin motivo ni justificación. No les permitieron ingresar al edificio, ni retirar sus pertenencias.

Es por ello que colegas y compañeros -de los sesenta y cinco despedidos- realizaron un paro que duró 48 horas. Durante las últimas veinticuatro se realizó un festival de música gratuito exigiendo la reincorporación de los trabajadores. El evento comenzó a la tarde y terminó cerca de la medianoche.

Grupos como Ella Es Tan Cargosa, La Delio Valdez, solistas como Bruno Arias o Ivan Noble, se hicieron presentes a lo largo de la calle Tacuarí al 1800. Los músicos que subieron al escenario proclamaron NO a los despidos en Clarín.

El Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) estuvo encargado de la organización y de la venta de comida para los presentes.

El gran contraste del evento lo marcó el edificio de Clarín. Estaba vallado a lo largo de su instalación y una pequeña puerta con cerrojo electrónico servía de ingreso. El estrecho pasillo metálico, donde los árboles de la cuadra servían de techo, desembocaba en la puerta principal de la redacción.

La libertad estaba en la calle. Diciendo presente con banderas y pancartas, trabajadores de distintos medios como “Télam” o “Página 12”, abrazaron a los despedidos en Clarín.

Walter Daniel Raiño, ex redactor de deportes, fue uno de los 65 despedidos. Tras haber servido 23 años para la empresa, detalló: “Me enteré por mail porque abrí la casilla eventualmente. La situación es bastante dolorosa. Me presenté a trabajar y me encontré con una doble valla de contención con personal de seguridad incluido”.

Tras haber estado una semana luchando por la reincorporación a los puestos, los empleados despedidos lograron el apoyo interno en la empresa y de trabajadores de prensa ajenos a Clarín.

Walter, además de agradecer la solidarización que hubo para con ellos, reconoció: “Me duele que colegas que pertenecen al mismo grupo, que han trabajado a la par de nosotros, no hayan dicho una sola palabra de apoyo. En los ’90 todos unidos decíamos que ‘la peor opinión es el silencio’, y en este caso el silencio habla por sí mismo”.

Guillermo Tagliaferri es otro de los sesenta y cinco despedidos de Clarín. Se desempeñaba en la redacción de deportes. Denunció que “nos echaron de una manera cruel e inhumana: mediante un mail”.

Además, relató: “Trabajé 39 años para la empresa. La presencia policial era exagerada y uno en la puerta con una lista nos decía: ´Vos trabajas, vos no´. No entiendo por qué. Los comercios en el país están en quiebra pero no es el caso de Clarín. Encima en la redacción hace falta gente, nosotros hacíamos trabajo de más... fuera de eso, estamos fortalecidos por el apoyo que nos están dando”, aseguró Tagliaferri.


*Bruno Cativiela, estudiante de Periodismo Deportivo, 3er año, Turno Mañana, ETER.