Hacer Prensa
Por Macarena López | @macarenalpez12
Fernanda Mainelli es jefa de prensa de la editorial Penguin Random House, una empresa alemana que nuclea los sellos más importantes: Aguilar, Alfaguara, Grijalbo, Lumen, Sudamericana, Vergara. Fabricio Dietrich es prensa del bloque de diputados del Frente para la Victoria y vocero principal del diputado Rodolfo Tailhade. Ambos visitaron a los estudiantes de segundo año de la carrera de Periodismo.
El objetivo de la charla fue comparar sus trabajos que, a pesar de ser los mismos, se conforman en torno a rubros totalmente distintos: los libros y la política. En algunos puntos coincidieron: saben que muchos prenseros pagan para conseguir notas en grandes medios o con periodistas reconocidos, pero ellos optan por no hacerlo; “Una vez que pagás, pagás siempre y si dejás de pagar no te hacen más notas”, aseguró Fernanda Mainelli.
Los invitados indicaron que el trabajo de prensa muchas veces es confundido con el de marketing. “Marketing de lo que se va a ocupar es de pensar una campaña de vía pública, que se paga y es cara. Una campaña de medios que probablemente incluya algo en la radio, como puede ser un programa en Radio Mitre o en Radio Con Vos, con Sietecase, María O’Donnell, o Tenembaum, que se dedican mucho a los libros. También hay una campaña de venta que es de posición del libro en librerías independientes, en la vía pública, radio, tele y seguramente va a tener una puesta en medios digitales y en las redes”, detalló Fernanda Mainelli y confesó: “Ellos tienen un presupuesto, además, que es bastante abultado, para cubrir toda esa campaña”.
La protagonista aseguró que comienza su labor pensando en todos los periodistas que van a recibir el libro nuevo, porque sobre esa base es donde van a trabajar y pedir entrevistas para el autor o autora según corresponda. Por su parte, Fabricio Dietrich, prensa del bloque de diputados del Frente para la Victoria, manifestó: “El que pasó por el periodismo tiene muchas más herramientas: sabe escribir una gacetilla, sabe los horarios de los medios para ver cuándo meter algo, cuándo sacar un comunicado, cuándo puede salir el político a hablar de ciertos temas. Además, conoce lo que es la noticia y sabe que algo que está haciendo puede ser más noticiable o menos noticiable y dónde venderlo, si le sirve a un diario económico o a un programa de panelistas”, y agregó: “Hay otro puesto que es el de operador. El operador es el que habla con los periodistas, con los editores, y que trata de que hablen bien de su candidato o de su espacio, y cuando van a hablar mal, tratan de mitigarlo lo máximo posible”.
Los protagonistas trabajan de lo mismo, aunque se diferenciaron; Fernanda Mainelli habló de prolijidad y organización. “En Penguin lo que tiene de interesante es que nosotros conocemos los libros que vamos a publicar por lo menos tres meses antes, conocemos cuales son los títulos que vamos a sacar y los autores que vamos a tener. Yo ya sé que vamos a editar en Diciembre, sé que va a haber en enero y en febrero, medianamente”, admitió Mainelli y Dietrich se sonrojó: “Yo no sé ni qué va a pasar la semana que viene. De hecho esta semana se dio vuelta todo. Ese es el caos que se vive en la política y más cuando se vive en una crisis como la de ahora”.
La jefa de prensa de Penguin dijo que hacer prensa en definitiva es vender contenido periodístico. “La única manera de convencer a un periodista para que haga una nota de lo que nosotros vendemos, es conocer lo que estamos vendiendo”, determinó Mainelli.
Actualmente ella está pensando en el próximo libro de cuentos de Claudia Piñeiro: “Leí el libro, sé cómo son los cuentos, hay uno sobre el aborto, hay dos cuentos sobre paternidades fallidas. Todos tienen contenido social y político, hay también algún cuento de amor fuerte y hasta violento”, confesó.
Por su parte, Fabricio Dietrich compartió su actual experiencia laboral: “Rodolfo Tailhade es un proyecto que tengo porque es el caso de un diputado poco conocido pero que tiene un perfil muy bueno según mi opinión, capaz pero muy brutal. Es un tipo que de derecho penal sabe muchísimo, que cuando pensamos en qué puede decir el 80% de las cosas se le ocurren a él. Entonces eso es más fácil, es un perfil muy bueno”, concluyó Dietrich.
El objetivo de la charla fue comparar sus trabajos que, a pesar de ser los mismos, se conforman en torno a rubros totalmente distintos: los libros y la política. En algunos puntos coincidieron: saben que muchos prenseros pagan para conseguir notas en grandes medios o con periodistas reconocidos, pero ellos optan por no hacerlo; “Una vez que pagás, pagás siempre y si dejás de pagar no te hacen más notas”, aseguró Fernanda Mainelli.
Los invitados indicaron que el trabajo de prensa muchas veces es confundido con el de marketing. “Marketing de lo que se va a ocupar es de pensar una campaña de vía pública, que se paga y es cara. Una campaña de medios que probablemente incluya algo en la radio, como puede ser un programa en Radio Mitre o en Radio Con Vos, con Sietecase, María O’Donnell, o Tenembaum, que se dedican mucho a los libros. También hay una campaña de venta que es de posición del libro en librerías independientes, en la vía pública, radio, tele y seguramente va a tener una puesta en medios digitales y en las redes”, detalló Fernanda Mainelli y confesó: “Ellos tienen un presupuesto, además, que es bastante abultado, para cubrir toda esa campaña”.
La protagonista aseguró que comienza su labor pensando en todos los periodistas que van a recibir el libro nuevo, porque sobre esa base es donde van a trabajar y pedir entrevistas para el autor o autora según corresponda. Por su parte, Fabricio Dietrich, prensa del bloque de diputados del Frente para la Victoria, manifestó: “El que pasó por el periodismo tiene muchas más herramientas: sabe escribir una gacetilla, sabe los horarios de los medios para ver cuándo meter algo, cuándo sacar un comunicado, cuándo puede salir el político a hablar de ciertos temas. Además, conoce lo que es la noticia y sabe que algo que está haciendo puede ser más noticiable o menos noticiable y dónde venderlo, si le sirve a un diario económico o a un programa de panelistas”, y agregó: “Hay otro puesto que es el de operador. El operador es el que habla con los periodistas, con los editores, y que trata de que hablen bien de su candidato o de su espacio, y cuando van a hablar mal, tratan de mitigarlo lo máximo posible”.
Los protagonistas trabajan de lo mismo, aunque se diferenciaron; Fernanda Mainelli habló de prolijidad y organización. “En Penguin lo que tiene de interesante es que nosotros conocemos los libros que vamos a publicar por lo menos tres meses antes, conocemos cuales son los títulos que vamos a sacar y los autores que vamos a tener. Yo ya sé que vamos a editar en Diciembre, sé que va a haber en enero y en febrero, medianamente”, admitió Mainelli y Dietrich se sonrojó: “Yo no sé ni qué va a pasar la semana que viene. De hecho esta semana se dio vuelta todo. Ese es el caos que se vive en la política y más cuando se vive en una crisis como la de ahora”.
La jefa de prensa de Penguin dijo que hacer prensa en definitiva es vender contenido periodístico. “La única manera de convencer a un periodista para que haga una nota de lo que nosotros vendemos, es conocer lo que estamos vendiendo”, determinó Mainelli.
Actualmente ella está pensando en el próximo libro de cuentos de Claudia Piñeiro: “Leí el libro, sé cómo son los cuentos, hay uno sobre el aborto, hay dos cuentos sobre paternidades fallidas. Todos tienen contenido social y político, hay también algún cuento de amor fuerte y hasta violento”, confesó.
Por su parte, Fabricio Dietrich compartió su actual experiencia laboral: “Rodolfo Tailhade es un proyecto que tengo porque es el caso de un diputado poco conocido pero que tiene un perfil muy bueno según mi opinión, capaz pero muy brutal. Es un tipo que de derecho penal sabe muchísimo, que cuando pensamos en qué puede decir el 80% de las cosas se le ocurren a él. Entonces eso es más fácil, es un perfil muy bueno”, concluyó Dietrich.