Con un pequeño anotador color rojo en la mano derecha, a modo de ayuda de memoria, Colombo inició la charla así: “Les periodistas son trabajadores. Para que las cosas pasen, hay que agarrar la pala”. No tardó en remarcar la importancia de involucrarse en el proceso de gestionar una entrevista, no solo analizar el tema que se va a abordar y desde qué puntos de vista, si no también conocer al entrevistado: “No es fácil conseguir entrevistas, es importante pensar lateralidades, buscar múltiples medios de contacto y marcarnos objetivos alcanzables. Saber abordar bien a un contacto es la clave del éxito”. En relación con esto, advirtió sobre la posibilidad de tener que interactuar con intermediarios. “Prensas”, con quienes es fundamental construir un vínculo de confianza. “Si se cierra una puerta es difícil abrir otras. Debemos ser honestos intelectualmente y respetar los acuerdos”, mencionó en referencia a las condiciones que puede imponer un prensa a la hora de la entrevista.

De la “República de La Matanza”, como se autodefine en Twitter, habló también sobre la forma de contactar a un personaje. Que siempre hay que hacerlo por mensaje de texto, no enviar audios ni llamar en primera instancia. Ser claros, cordiales y sobre todo: escribir sin errores de ortografía. “El profesionalismo vende, hay que ser profesionales”. Destacó la necesidad de ser insistentes e incisivos para darle sentido a la labor periodística y el valor de construir una red de contactos: “La tarea periodística es eminentemente colectiva, sin el resto de los colegas no existimos como trabajadores y trabajadoras”.

Ante la consulta de un alumno sobre la generación de contenido, recordó su experiencia en la cobertura del festival de música de Glastonbury 2022: “Hay que prestar atención a los detalles, en el medio de la gente vi una bandera argentina con la imagen del “Diego”, y ese fue el disparador para una nota con un grupo de argentinos, en Inglaterra, en el festival más grande del mundo”. No se fue, sin antes reflexionar sobre la desigualdad de género en los medios. “La desigualdad en el trabajo es estructural. Me ha pasado que me inviten a salir a cambio de una nota. He cobrado menos que un colega varón que cumple con la misma función que yo. La única manera de solucionarlo es la construcción colectiva”. Señaló la importancia de que las trabajadoras de prensa se organicen e incluso mencionó que existen grupos de WhatsApp específicos para esto. De todas formas, aclaró que, si bien hay algunos medios que han dado un paso hacía adelante al tener editoras de género, en muchos aún es una asignatura pendiente la diversidad de trabajadores de otras identidades. Y señaló: “Las redes de contención colectiva (sindicato) son la mejor alternativa para cuidarse. Son trabajadores, cobren por su trabajo. Todo lo que hagan, vale”.

* Por Daniel Insaurralde Gelmer (@danhell_666), alumno de 2do año de Periodismo Deportivo.